Ya se que habrá mucho material en la red sobre el tema, pero como yo siento la necesidad de contar mi experiencia, como madre y como maestra de niños con intolerancias alimentarias y a lo mejor os sirve de la experiencia.
Besitos sin gluten.
Aquí tenéis un juego muy chulo que me ha prestado un amigo (gracias Nacho) y que nos ayuda a conocer los alimentos, cuidado que hay muchos que tienen gluten, podemos también de paso aprender a detectarlos.
ALGUNOS DATOS SOBRE LA ENFERMEDAD CELIACA (no muchos)
¿QUÉ ES LA ENFERMEDAD CELIACA?:
La enfermedad celiaca es una intolerancia permanente al gluten, que es una proteína que tienen muchos cereales: trigo, cebada, avena y centeno.
Al tomar alimentos con gluten las personas celiacas sufren pequeñas lesiones en su intestino delgado, que poco a poco se hacen más severas y permanentes. Esto conlleva que no puedan absorber adecuadamente los nutrientes, vitaminas, proteínas, hidratos de carbono, lípidos y sales minerales.
¿CUALES SON SUS SÍNTOMAS?
Los síntomas más frecuentes son: pérdida de apetito y de peso diarrea, distensión abdominal, que quiere decir que se te hincha mucho la tripita, y te duele. Como te duele mucho la tripa, te encuentras mal y te entra mal humor.
Estos síntomas suelen aparecer en los primeros años de vida. Como los niños son muy pequeños, no saben explicar lo que les pasa, cosa que dificulta su diagnóstico. Pero cuidado, los médicos especialistas en el aparato digestivo estiman que hay un importante porcentaje de adultos sin diagnosticar, porque sus síntomas son leves o muy extraños.
EL TRATAMIENTO:
El único tratamiento de la enfermedad celiaca consiste en seguir una estricta dieta sin gluten durante toda la vida. Con esta desaparecen los síntomas y el intestino se recupera.
ALIMENTOS QUE TIENEN, O PUEDEN TENER GLUTEN:
De forma natural tienen gluten los cereales, (salvo el arroz y el maíz) y lógicamente los alimentos preparados con estos cereales: pan, tartas, pasteles, bizcochos, magdalenas...
Recordar también utilizamos harina de trigo en rebozados, empanados, espesado de salsas etc.
Muchos alimentos preparados lo tienen como ingrediente "oculto", como embutidos, cacao para desayuno, salsas, pastillas de caldo...
Afortunadamente, casi todos los alimentos vienen ya etiquetados con algún tipo de logotipo sin gluten, más o menos autorizado por FACE, pero que viene bien para no tener que estar leyendo toda la lista de ingredientes y seguir con la duda sobre el origen de "fibras vegetales", "almidones modificados" y "colorantes autorizados", que suelen utilizar como vehículo harina de trigo.
Pero el principal peligro es el de contaminación cruzada, la harina en general, es bastante volátil, en fábricas, cocina, obradores donde se manipulan harinas con gluten pueden mezclarse o caer pequeñas cantidades en los alimentos para celiacos.
EL CELIACO Y LA VIDA SOCIAL
La enfermedad celiaca no debe suponer ningún obstáculo para el desarrollo de una vida normalizada.
Aunque ser celiaco implica una serie de limitaciones, una vez diagnosticada y tratada adecuadamente, deja de ser un problema.
A un niño celiaco no se le debe impedir la asistencia a fiestas, cumpleaños o campamentos escolares, sino facilitarle la participación en este tipo de actividades, informando previamente a los responsables sobre la dieta que debe seguir y la importancia de no realizar transgresiones.
COMO ACTUAR EN EL COLEGIO
El aumento del número de niños celiacos en edad escolar es notable. Esto no quiere decir necesariamente un mayor conocimiento por parte de la sociedad de la enfermedad celiaca.
Para conseguir este objetivo, resulta imprescindible informar a todos los estamentos implicados:
1- INFORMAR AL NIÑO:
Está demostrado que incluso a edades muy tempranas, la información facilita la percepción de control y una mejor adaptación a la dieta sin gluten. Por ello es imprescindible que los padres tomen la iniciativa e informen al primer interesado: su hijo.
La información debe producirse lo más pronto posible, de forma clara, sin engaños, adaptando esta información a la edad del niño y respondiendo a sus dudas en la medida que las verbalice.
2- INFORMAR A LOS PROFESORES:
Entre padres y profesores, debe haber un intercambio de información y un compromiso de mutua colaboración.
Los padres deben proporcionar a los profesionales del colegio la información necesaria sobre la enfermedad celiaca y sobre los alimentos que el niño celiaco debe y no debe ingerir, mantenerlos informados de cualquier novedad que se produzca.
De forma natural tienen gluten los cereales, (salvo el arroz y el maíz) y lógicamente los alimentos preparados con estos cereales: pan, tartas, pasteles, bizcochos, magdalenas...
Recordar también utilizamos harina de trigo en rebozados, empanados, espesado de salsas etc.
Muchos alimentos preparados lo tienen como ingrediente "oculto", como embutidos, cacao para desayuno, salsas, pastillas de caldo...
Afortunadamente, casi todos los alimentos vienen ya etiquetados con algún tipo de logotipo sin gluten, más o menos autorizado por FACE, pero que viene bien para no tener que estar leyendo toda la lista de ingredientes y seguir con la duda sobre el origen de "fibras vegetales", "almidones modificados" y "colorantes autorizados", que suelen utilizar como vehículo harina de trigo.
Pero el principal peligro es el de contaminación cruzada, la harina en general, es bastante volátil, en fábricas, cocina, obradores donde se manipulan harinas con gluten pueden mezclarse o caer pequeñas cantidades en los alimentos para celiacos.
EL CELIACO Y LA VIDA SOCIAL
La enfermedad celiaca no debe suponer ningún obstáculo para el desarrollo de una vida normalizada.
Aunque ser celiaco implica una serie de limitaciones, una vez diagnosticada y tratada adecuadamente, deja de ser un problema.
A un niño celiaco no se le debe impedir la asistencia a fiestas, cumpleaños o campamentos escolares, sino facilitarle la participación en este tipo de actividades, informando previamente a los responsables sobre la dieta que debe seguir y la importancia de no realizar transgresiones.
COMO ACTUAR EN EL COLEGIO
El aumento del número de niños celiacos en edad escolar es notable. Esto no quiere decir necesariamente un mayor conocimiento por parte de la sociedad de la enfermedad celiaca.
Para conseguir este objetivo, resulta imprescindible informar a todos los estamentos implicados:
1- INFORMAR AL NIÑO:
Está demostrado que incluso a edades muy tempranas, la información facilita la percepción de control y una mejor adaptación a la dieta sin gluten. Por ello es imprescindible que los padres tomen la iniciativa e informen al primer interesado: su hijo.
La información debe producirse lo más pronto posible, de forma clara, sin engaños, adaptando esta información a la edad del niño y respondiendo a sus dudas en la medida que las verbalice.
2- INFORMAR A LOS PROFESORES:
Entre padres y profesores, debe haber un intercambio de información y un compromiso de mutua colaboración.
Los padres deben proporcionar a los profesionales del colegio la información necesaria sobre la enfermedad celiaca y sobre los alimentos que el niño celiaco debe y no debe ingerir, mantenerlos informados de cualquier novedad que se produzca.
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